La puesta en marcha de estos corredores es una de las medidas contempladas en el nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), que ha sido elaborado por la prestigiosa consultora internacional Aimsun, que ha realizado trabajos similares en ciudades como Nueva York, Sidney, París o Barcelona con la colaboración de la Universidad de Murcia y la Universidad Politécnica de Cartagena.
“El PMUS es un elemento nuclear en la estrategia de transformación urbana que estamos desarrollando durante estos años. Es proyecto de ciudad, pensado, diseñado y elaborado para conectar nuestros 28 barrios y sus 55 pedanías, dentro de este proyecto de ciudad”, ha explicado el alcalde de Murcia José Ballesta. Así, se configura como una herramienta fundamental en el diseño de la ciudad, pues planifica cómo será la movilidad del municipio durante los próximos años, definiendo y diseñando corredores y la vertebración y conexión entre los distintos barrios y pedanías, constituyendo una hoja de ruta que tiene como objetivo reequilibrar el municipio, coser sus fracturas históricas, y redistribuir centralidades, oportunidades y calidad de vida.
Lo hace, además, en un momento clave, con la licitación del nuevo modelo de transporte, la llegada del tranvibús o una ampliación del tranvía de la que ya se ha encargado el anteproyecto, diseñando a través de 3 ejes estratégicos, 9 líneas de actuación y 64 medidas la movilidad hasta 2032.
El centro se expande hacia el sur, este y oeste
El PMUS contribuirá a reequilibrar la ciudad y dar un paso decisivo hacia un modelo más integrador con el río Segura como eje vertebrador consolidando así el camino iniciado con Murcia Río, y devolviendo la centralidad a los barrios del sur, siendo esta una de las metas de actuaciones como ´Conexión Sur´, la ampliación del tranvía o el traslado de la estación de autobuses al Carmen.
Se amplía así el centro hacia el sur integrando barrios como El Carmen, el Infante o Santiago el Mayor; hacia el este, con La Paz, Vistabella y La Fama; y hacia el oeste, incluyendo San Andrés, San Antón y San Antolín.
Con este objetivo, el PMUS busca mejorar las conexiones peatonales, recuperar espacio público, reforzar los servicios, priorizar la accesibilidad y reactivar el comercio y la vida urbana en esos barrios.
El peatón, protagonista de la movilidad
El nuevo PMUS sitúa al peatón como el auténtico protagonista de la movilidad, consolidando la apuesta realizada en los últimos años con la puesta en marcha de espacios tan importantes como Alfonso X o el Paseo Fluvial, lo que ha contribuido a conseguir una ciudad más verde y amable.
Ha de tenerse en cuenta que los principales itinerarios de la ciudad tienen actualmente una concepción norte-sur, como puede verse en Gran Vía, Correos, el Corredor Verde, la calle Correos o la Avenida de la Fama.
Igual distribución sigue la movilidad peatonal, con un gran eje que une la Plaza Circular con la Catedral, a modo de columna vertebral del casco histórico.
Esta estructura se complementará ahora con la puesta en marcha de tres grandes ejes que perpendiculares que permitan que esa conexión se desarrolle también de este a oeste, reforzando así la conexión peatonal desde San Andrés y San Antolín hasta La Paz y Vistabella.
El primero de estos ejes, será el conocido como ´de la acequia nueva´ y conectará la Plaza de la Universidad con el Jardín de la Seda. Servirá este corredor como unión de museos tan importantes como el de la Ciudad o Santa Clara, iglesias barrocas como la de San Miguel, San Esteban o las Agustinas, la Ermita del Salitre, teatros como el Romea y el Circo o zonas verdes.
Parte de ese primer eje un segundo corredor conocido como ´de la Arrixaca´, en homenaje al arrabal que se recuperará en San Esteban, y al que contribuirá a dar esplendor y continuidad, y no volverá a converger con el eje de la acequia hasta la Plaza de la Universidad. Transcurre por arterias como Gutiérrez Mellado o Jerónimo de Roda y, además del yacimiento que le da nombre, conectará lugares tan importantes como el Museo Arqueológico.
El último de los ejes es el del antiguo zoco, que servirá para poner en valor el Mercado de Verónicas que se encuentra actualmente en rehabilitación, conectando la Plaza Belluga y la Catedral con elementos patrimoniales y espacios emblemáticos tan importantes como el Palacio Almudí, el Hotel Victoria o las iglesias de San Pedro y San Antolín.