El Real Murcia vuelve a tropezar con la misma piedra. En el Enrique Roca, ante un Ibiza que jugó con un hombre menos durante más de ochenta minutos, los granas volvieron a ofrecer una imagen preocupante, plana y sin alma. Ni la superioridad numérica ni los cambios de Joseba Etxeberria lograron cambiar el rumbo de un equipo que parece completamente bloqueado.
El Ibiza realizó un partido perfecto: compacto, solidario y letal en los momentos justos. El Real Murcia, en cambio, fue un conjunto previsible, que lo intentó una y otra vez por los costados, pero sin generar ni una sola ocasión clara de peligro. Los centros al área, repetitivos y desesperados, se estrellaban una y otra vez contra la defensa rival.
🔴 Expulsión temprana y espejismo de control
El encuentro parecía ponerse de cara muy pronto para el Real Murcia. A los nueve minutos, Del Pozo vio la segunda amarilla y fue expulsado, dejando al Ibiza con diez. Pero ni eso bastó. El conjunto pimentonero no supo qué hacer con el balón y se vio superado tácticamente por un rival que, con uno menos, supo cerrarse atrás y esperar su momento.
Ese momento llegó al minuto 30: un penalti cometido por Alberto González permitió a Fede Vico abrir el marcador. Golpe psicológico para un Murcia que nunca reaccionó. Al descanso, la sensación en la grada era de impotencia total.
⚽ Sin alma, sin ideas, sin rumbo
En la segunda mitad, Etxeberria movió el banquillo con las entradas de Pedro Benito, Palmberg, Cadorini o Pedro León. Nada cambió. El Ibiza volvió a golpear tras una pérdida absurda de Alberto González, con un zapatazo de Unai Medina desde fuera del área que sentenció el partido (0-2).
El Real Murcia acumuló posesión, pero sin profundidad, sin ritmo, sin variantes. Ni por dentro ni por fuera consiguió generar peligro. Solo un disparo lejano de Pedro Benito en el descuento rompió la monotonía, y ni siquiera fue entre los tres palos.
⚠️ Situación límite
La derrota deja al Real Murcia en una situación crítica y con un proyecto que hace aguas por todas partes. El equipo no transmite, no compite y parece haber perdido la conexión con su afición, que despidió al conjunto entre silbidos y resignación.
Joseba Etxeberria, cada vez más discutido, parece haber agotado el crédito. El vasco no encuentra soluciones, y su continuidad al frente del banquillo grana pende de un hilo.
El Real Murcia, hundido y sin identidad, acaba la jornada colista de la categoraí en espera de la decisión final de Felipe Moreno.