El Grupo Municipal de VOX en el Ayuntamiento de Murcia llevará a debate al próximo pleno una iniciativa para solicitar beneficios fiscales en materia de vivienda. Asistimos en España a una auténtica emergencia habitacional, sin precedentes en casi siete décadas, desde el inicio del gran desarrollo urbanístico que se inicia en los años 50 del pasado siglo.
El Gobierno de Sánchez aprobó en 2023 una Ley de Alquiler que todos los expertos anunciaron que iba a provocar un auténtico desastre, ya que se aplicó previamente en varios países, siempre con iguales resultados. Por supuesto, así ha ocurrido también en España. Esa Ley, de inspiración inequívocamente comunista, intervino el mercado del alquiler de forma que sacó de ese mercado, de forma prácticamente inmediata, muchas viviendas cuyos propietarios quedaban sometidos a una gravísima inseguridad jurídica. Una inseguridad de la que, como es lógico, huyeron.
Una huida que a su vez encareció de forma desbocada la vivienda, al haber muy poca oferta de alquiler para una demanda igualmente galopante, por la brutal presión inmigratoria. Es decir, una Ley que anunciaba que se aumentaría el mercado del alquiler con precios asequibles consiguió justamente lo contrario: poca vivienda a precio desorbitado, como estaba previsto por todos excepto, al parecer, por el Gobierno y sus socios aferrados a los dogmas totalitarios de izquierda y medios subvencionados.
La ya desgraciadamente célebre Ley del Alquiler socialcomunista vino a intervenir un mercado ya depauperado, sobre todo desde la pandemia. Desde 2020, la oferta de vivienda en alquiler permanente ha caído un 56% en España, más de la mitad de la vivienda en alquiler que había hace 5 años ha salido de ese mercado, mientras que la población en situación legal en el país ha aumentado en aproximadamente 2.200.000 personas. El Gobierno de Sánchez, con la ayuda del Partido Popular y en colaboración con las mafias internacionales de tráfico de personas, ha importado tres millones de inmigrantes en siete años. El resultado es más precariedad para todos.
En 2011, el 70% de los menores de 35 años eran dueños de sus casas, y hoy sólo son el 31%, mucho menos de la mitad. VOX denuncia que, mientras los españoles padecen exclusión residencial, los gobiernos del bipartidismo PP-PSOE han decidido hacer negocio con su miseria, dado que prácticamente un tercio del importe total de un inmueble es directamente imputable a impuestos o tasas. Para VOX, es indecente que las administraciones públicas sigan batiendo récords de recaudación mientras los españoles baten récords de infravivienda.
En el municipio de Murcia, la situación es peor si cabe. El crecimiento exponencial de población ha sido brutal, dado que Murcia es uno de los territorios nacionales más tensionados por la inmigración descontrolada. Esto alimenta la presión sobre el mercado de la vivienda, con una oferta de alquiler muy reducida, cada vez más menguante y, por eso, también muy cara (más cara que la media nacional), frente a una demanda disparatada. La construcción y oferta de alquiler de vivienda pública resulta ridícula.
VOX quiere llevar a cabo rebajas fiscales masivas con el objeto de facilitar el acceso a la vivienda de los españoles, tanto en alquiler como en propiedad. Para ello será necesario un control riguroso y exhaustivo de nuestras fronteras, construcción masiva de vivienda pública y liberalización de suelo para promover la construcción de vivienda libre, eliminando trabas y asegurando la prioridad de los españoles en el acceso a la vivienda.
Alba Franco, portavoz adjunta de VOX, afirma: “En España los pisos cuestan un 30% más caros porque los políticos así lo quieren. Sin el negocio que hacen los políticos del bipartidismo PP-PSOE con la vivienda, un español podría comprarse, con los mismos medios que tiene ahora, una casa un 30% más barata o un 30% más grande. España es uno de los países europeos con mayor fiscalidad sobre la vivienda y que menos vivienda protegida construye. VOX pide al PP que reduzca y bonifique los impuestos asociados a la vivienda, como el IBI o el ICIO, y tasas como las licencias de edificación, licencias de primera ocupación o cédulas de habitabilidad, todas las cuales repercuten directamente en el precio de la vivienda que pagan los murcianos”.
