Adquisición del Castillo de Alcalá por el Ayuntamiento de Mula

castillo-de-alcala

El alcalde de Mula, Juan Jesús Moreno, destaca que “esta adquisición supone un hito para la historia de nuestro municipio, puesto que era una reivindicación que viene de largo tiempo y hemos cumplido con nuestro compromiso. Nos ayudará a ensanchar nuestra apuesta por poner en valor el incalculable valor de Mula y sus pedanías”.

La Concejalía de Cultura y Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Mula, tras varios meses de trabajo y negociaciones con el propietario del Castillo de la Puebla de Mula, ha llegado a un acuerdo para la adquisición del monumento. Dicha negociación, que se cerró formalmente la semana pasada, reafirma el compromiso del equipo de Gobierno en el patrimonio cultural de Mula.

Este jueves, 16 de marzo, se ha aprobado en Junta de Gobierno Municipal la incoación del expediente para la adquisición del monumento. Tras ella, el alcalde ha querido agradecer al propietario su predisposición y buen talante para llevar a cabo esta adquisición histórica para el municipio, a quien ha mostrado su gratitud en nombre del pueblo de Mula.

Por su parte, el concejal de Cultura y Patrimonio Histórico, Diego Boluda, declaraba que “desde el equipo de Gobierno seguimos apostando por el patrimonio cultural de Mula y sus pedanías, y prueba de ello es esta adquisición, que culmina tras meses de negociaciones y trabajo. La titularidad pública del Castillo de Alcalá, unido a la Torre-Ermita hace unos meses, revitalizará la pedanía de La Puebla, proyecto por el que ya estamos trabajando”.

El Castillo de Alcalá o de la Puebla de Mula, está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de monumento, según la Ley 16/1985 de Patrimonio Histórico Español, de 25 de junio, (BOE 20 de junio de 1985).

El castillo, que domina el paisaje de la cuenca del río Mula desde su privilegiada posición, se sitúa en el paraje conocido como la Madalena, junto a la pedanía de La Puebla. La actual fortificación, levantada a base de tapial a mediados del siglo XII, se adaptó a la planicie de forma ovalada en lo alto del cerro, donde se levantaron los muros y torreones de planta cuadrangular que forman el recinto castillo. La técnica utilizada en la construcción de estas estructuras fue el tapial. En la actualidad, el único edificio que sobresale de los restos conservados corresponde a la puerta de acceso a la fortaleza. Al parecer nos encontramos ante el ejemplo más antiguo de puerta acodada de la Región de Murcia.  Una vez en el interior del recinto destaca, en la zona septentrional, una enorme extensión en superficie en la que se sitúan un conjunto de unos doce aljibes de planta rectangular dispuestos en batería.